¿Cómo comprar el cuadro ideal?

Te damos cuatro consejos para acertar a la hora de buscar un cuadro decorativo o una obra de arte para tu hogar.

Una buena obra de arte te despierta emociones y te obliga a hacer una pausa, aunque momentánea, a mitad del ajetreo del día; tener los cuadros adecuados en tu espacio, bien seleccionados y colocados, te produce sensación de bienestar, orden y equilibrio estético. Al comprar el arte correcto para ti, no solo estás mejorando tu calidad de vida, sino que estás haciendo una inversión rentable en un valor refugio, ya que una buena obra tiende a revalorizarse, además de obtener ventajas fiscales.

Al adquirir cuadros, que los hay para todos los presupuestos, apoyas a que difusores de arte puedan vivir de su oficio; y si compras obras actuales favoreces a artistas emergentes, fomentando con esto un círculo virtuoso de creatividad en el que a mayor demanda de obras de calidad y propuestas innovadoras, mejor y más amplia será la oferta. Si ya te decidiste a comprar, y en este caso no estamos hablando de los flechazos inminentes no planeados, sino de cuando optas conscientemente por adquirir una obra de arte para tu espacio, aquí tienes estas 4 sencillas recomendaciones para que seguro aciertes en la elección:

• Identifica cuál será la pared destino

Mide el espacio total del área despejada de la pared, para poder aprovechar al máximo el aporte decorativo de la pieza de arte, es importante que el tamaño de esta esté en proporción a su ubicación final.

Un cuadro pequeño no puede estar en un muro grande, o se pierde o incomoda. Aunque, también hay que decirlo, hay ciertos trucos para hacer parecer a un cuadro más grande a través del enmarcado o también se puede incluir dentro de una composición de cuadros que vistan a toda el área.

 

• Respeta el estilo de decoración del resto de la casa

Adhiérete al estilo de tu casa, hay tantos estilos en la decoración como en el arte, respeta la línea, no caigas en tentaciones, no lo vale; un cuadro capta de inmediato nuestra atención, así que puede acentuar, equilibrar o darle en el traste al diseño de nuestro espacio.

¿Casa moderna? No pongas bodegones del renacimiento ni obras artesanales ¿Casa sobria? No pongas cuadros con leds neón; claro que se pueden mezclar estilos, pero eso déjaselo a los expertos.

Y otro detalle, dale tanta importancia al marco como a la obra al momento de la elección.

• Busca información de la obra y de su artista

Al mostrar un poco de curiosidad sobre esta información seguro te llevarás una buena sorpresa; conocer lo que estás obteniendo y tener una comprensión más amplia sobre el autor, su contexto y lo que quiso expresar, te permitirá apreciar mejor la obra que estará en tu espacio y por tanto la disfrutarás más.

Es importante que al comprar un cuadro pidas el certificado de autenticidad, una formalidad que beneficia la venta futura, este documento debe contener por lo menos el nombre del autor y su firma, título de la obra, sus medidas, fecha de realización, número de edición si es obra seriada, materiales y fotografía de la misma.

 

• Siente conexión con el cuadro

Asegúrate de que la obra que esté en tu casa sea algo que te inspire y te enamore. Tiene que ser un amor a primera vista, adquiere algo que atraiga tu mirada y al hacerlo te saque una sonrisa; y luego aléjate un poco, medítalo y piensa si es algo que querrías ver toda tu vida y si crees que cada vez que te lo topes te hará sentir bien. No es que estés eligiendo pareja para casarte, pero si es una pieza que te estás llevando a tu espacio, a formar parte de tu vida y a embellecer tu entorno.